Comenzó una huelga de hambre en contra de la inseguridad vial

Esto demuestra q el Estado no solo NO RESUELVE, lo peor es que no sabe ni le interesa la vida de los usuarios. Guillermo Alvarez tiene 33 años y ayer inició una huelga de hambre frente al Congreso de la Nación para pedir que varios proyectos para modificar la ley de tránsito salgan del cajón. Su hermano Marcos, de 19 años, murió el 8 de junio del año pasado al ser atropellado en la ruta 22, a la altura de Plottier, en Neuquén, por una camioneta que, según declararon los testigos, circulaba a más de 175 kilómetros por hora. Pero el conductor, que fue identificado, nunca estuvo detenido. Lo acompaña en este reclamo un grupo de las Madres del Dolor, encabezadas por Viviam Perrone, cuyo hijo, Kevin Sedano, también fue víctima de un accidente de tránsito. "No puede ser que acá un accidente tape al otro. El viernes lamentábamos cómo un colectivo se subió a la vereda en Pontevedra y le quitó la vida a Brisa, de tres años. No alcanzamos a entender qué ocurrió cuando nos enteramos de que otro joven murió atropellado en Figueroa Alcorta y La Pampa. También murió la intendenta de San Martín de los Andes en un hecho vial, y ayer [por anteayer] en Florencio Varela un joven alcoholizado atropelló y quitó la vida a Karen Ríos, de 15 años, y a Miguel Romero, de 18... ¿Qué más tiene que ocurrir para que alguien haga algo?", reclamó Perrone, que, pasadas las 15 de ayer, y a pesar del frío, se instaló junto a Alvarez frente al Congreso. No es el primer sacrificio físico que hace Alvarez en reclamo de nuevas leyes de tránsito. En marzo último, Alvarez llegó al Congreso, después de caminar 20 días desde Plottier hasta la Capital. Lo llamó la "caminata por la vida". Fue recibido por la diputada por el Movimiento Popular Neuquino Olga Guzmán. "Le entregué un petitorio y un proyecto de ley, que desde el 12 de marzo están guardados en un cajón en la Comisión Penal", reclama Alvarez. "Presentamos otro proyecto al ministro Florencio Randazzo, que nos recibió y prometió que iba a haber avances hace varios meses. Pero ese proyecto nunca se movió de la Casa Rosada. Pedimos que los proyectos dejen los cajones y que al menos los estudien", pidió Perrone. Guillermo Alvarez tiene 33 años y ayer inició una huelga de hambre frente al Congreso de la Nación para pedir que varios proyectos para modificar la ley de tránsito salgan del cajón. Su hermano Marcos, de 19 años, murió el 8 de junio del año pasado al ser atropellado en la ruta 22, a la altura de Plottier, en Neuquén, por una camioneta que, según declararon los testigos, circulaba a más de 175 kilómetros por hora. Pero el conductor, que fue identificado, nunca estuvo detenido. Lo acompaña en este reclamo un grupo de las Madres del Dolor, encabezadas por Viviam Perrone, cuyo hijo, Kevin Sedano, también fue víctima de un accidente de tránsito. "No puede ser que acá un accidente tape al otro. El viernes lamentábamos cómo un colectivo se subió a la vereda en Pontevedra y le quitó la vida a Brisa, de tres años. No alcanzamos a entender qué ocurrió cuando nos enteramos de que otro joven murió atropellado en Figueroa Alcorta y La Pampa. También murió la intendenta de San Martín de los Andes en un hecho vial, y ayer [por anteayer] en Florencio Varela un joven alcoholizado atropelló y quitó la vida a Karen Ríos, de 15 años, y a Miguel Romero, de 18... ¿Qué más tiene que ocurrir para que alguien haga algo?", reclamó Perrone, que, pasadas las 15 de ayer, y a pesar del frío, se instaló junto a Alvarez frente al Congreso. No es el primer sacrificio físico que hace Alvarez en reclamo de nuevas leyes de tránsito. En marzo último, Alvarez llegó al Congreso, después de caminar 20 días desde Plottier hasta la Capital. Lo llamó la "caminata por la vida". Fue recibido por la diputada por el Movimiento Popular Neuquino Olga Guzmán. "Le entregué un petitorio y un proyecto de ley, que desde el 12 de marzo están guardados en un cajón en la Comisión Penal", reclama Alvarez. "Presentamos otro proyecto al ministro Florencio Randazzo, que nos recibió y prometió que iba a haber avances hace varios meses. Pero ese proyecto nunca se movió de la Casa Rosada. Pedimos que los proyectos dejen los cajones y que al menos los estudien", pidió Perrone. evangelina Himitian LA NACION